En ese momento quise gritar y no tenía voz !!!!!
La verdad es que no recuerdo cuando la estúpida decidió abandonarme, sólo sé que un día, me levanté de la cama con la necesidad de contar ciertas verdades atoradas en las paredes, cuando abrí los labios, sentí como se rompían las comisuras, como se secaba mi lengua ante el inerte movimiento de tu articulación mal elaborada y la estridente vociferación de tus silencios.
La mentira es que recuerdo cómo fuí quedando mudo, un día me levanté de la cama con la necesidad de empapelarte con mentiras, por el simple hecho de apreciar como se desfigura su rostro, como fácilmente brotan lágrimas de esos ojos, pero en el proceso preferí cortar mis cuerdas y quedarme en la oscuridad de las palabras por un largo instante, inhalo una gran bocanada de aire, prendo mi Ipod para entonar mi canción favorita.
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