Desde que enfrenté el hecho que no seguiré esacapando a mi deseo de estudiar actuación, (al que más pendejo desistí por la opinión de mi estructurada familia), decidí acercarme a algo más que las clases de la escuela, sino también a
provechar que ahora tengo más tiempo y dar un paseo por la catelera teatral y respirar ese aire que emana de las tablas y del sudor de los actores en escena.
El Hombre Vertical: Sin duda, me demoré varios días en procesar esta ob
ra, tal vez porque la lógica parecía haberse escapado por la puerta antes de que yo pudiera entrar e
n a la sala.
O será que mi locura quedó expuesta ante la brillante actuación de Aline...Cada vez que suena el telefóno me preguntó: Qué quiero decirme a mi mismo?. La televisión, un personaje envolvente y presente cargado de imágenes de violencia, capturando a "Talula".
Allende, Bush e Inés de Suaréz unidos por una fecha en común, el exceso de líneas en la escenografía y en enano tiñiendo cada escena en algo aún más bizarre, aportan más surrealismo a esta obra, la música creada especialmente, a ratos parecía estar demasiado alta, impidiendo captar los diálogos entre los actores, pero, sin duda que esta creación colectiva logra su objetivo llamar la atencion y hacer pensar a un público poco acostumbrado a las expresiones carentes de lógica.
Tengo Miego Torero: De alguna manera se ha convertido en algo así como un éxito de
taquilla, será por la moda de la homosexualidad, la curiosidad de otros, en fin, la sala estaba llena.
En escena, Rodrigo Muñoz, también director del montaje, Claudia Pérez, Mario Soto y José Luis Aguilera dan vida a la novela del escritor Chileno Pedro Lemebel, quien en su particular estilo presenta en una ficción un relato crítico de un período en la historia política y social de nuestro país. Con elementos sutiles, como la presentación de fotografías y la voz en off de Sergio Campos locutor de la radio cooperativa sumergen al espectador en las profundidades de la decada del '80. Destaca la personificación de Lucia Hiriart, que roba enormes carcajadas del público, mientras el amor imposible entre los protágonistas Carlos y "la loca" muestra atisbos de la realidad de una minoría marginada.
Numancia: El asedio y conquista de la ciudad celtibérica de Numancia const
ituye uno de los episodios más interesantes de la conquista romana de la Península Ibérica, plasmados en la obra de Cervantes esta obra muestra en escena a grandes como Fernando González quien regresa a las tablas después de mucho tiempo de ausencia, Amparo Noguera deslumbra con su calidad, Antonia Zegers y otros que no se quedan atrás en lo más mínimo. Todos dan vida a un clásico de la dramaturgia con excelentes resultados, siendo a mi juicio la mejor obra en cartelera de las que hasta ahora he tenido el privilegio de asistir.
Rompiendo Códigos: Leí en algún medio, que el guión de esta obra recorrió toda la Universidad Católica antes de su estreno, ya que podía escapar a la línea editorial de la Pontificia o dejandonos de
eufemismos había que estudiar la presentación de la homosexualidad, de hecho el mismo director de la obra, Ramón Nuñez, realiza una pequeña introducción para hacer la salvedad que no pretenden con esto realizar una Apología sobre este tema sino que presenta una reflexión sobre la discriminación. También la sala estaba llena, concluyendo que un elemento seguro para el éxito de taquilla es ...
Lamentablemente, había leído una crítica antes de ir, que puede teñir mi visión sobre la actuación de Alvaro Escobar
como protagónico (Allan Turing). Su taratamudeo, cargado de rídiculos tics molestaban, desconcentraban y hacian reír a muchos, perdiendo el hilo de la escena ante el espectador. A ratos lograba conectarse con los otros personajes y mostrar destellos de calidad actoral, a otros se mostraba frío y distante, casi repitiendo un texto aprendido elegantemente con acento británico. Llamó más aún mi atención, el hecho que no fue capaz de quebrarse ante escenas tan llenas de dolor como enfrentar a una madre para asumir su Homosexualidad o al hablar sobre la muerte de su primer y gran amor "Chris". Si bien la ira y la rabia alcanzaban elevados puntos en su desempeño, el dolor y la pena sólo quedaban ahí, esperé más...Tal vez, es porque realmente Alvaro no es gay.
Esperanza Silva y Aranzazú, muestran que son actrices de tomo y lomo, dejándo atrás Adrenalina y esos supérfluos personajes de la Silva en teleseries.
La reflexión es la que indica Nuñez, la discriminación ante la Homosexualidad en la post-guerra, latente hasta hoy, de la cual es víctima Turing, (el protagónico de Escobar), ya que ni sus impresionantes títulos conseguidos en Cambridge, ni la brillante dimensión de su cerebro pudieron evitar que fuera enjuiciado por una de las legislaturas más represivas del siglo pasado en lo que se refiere a la opción sexual.
