domingo, diciembre 31, 2006

Surealismo

El placer culpable italiano suena en la radio, los árboles bailan fuera de mi ventana, el sol calienta las calles, mientras yo escribo estas líneas, por la necesidad de retomar algo que era común en mi y que de alguna manera he dejado atrás, sin motivos aparentes ni prohibiciones de ningún tipo, más bien la inercia de esta máquina que llamamos vida, me atrapa dejándome sólo limitadas ventanas de tiempo para hacer lo que realmente quiero.

He escuchado algunas estupideces este tiempo, por otra parte, también he aprendido ciertas cosas que no dejan de sorprenderme, finalmente en el momento que menos esperamos encontramos un espejo enorme frente a nuestra nariz que nos hace mirar hacia dentro, en vez de cegarnos con lo que vemos cada día.

La diferencia entre vivir y existir. Nunca reflexione sobre estas palabras, al escucharlas en nuestra cotidianidad no tienen ninguna injerencia y hasta significan lo mismo, pero si aprendemos a mirar bajo el agua, empezamos a marcar la gran diferencia.

Quiénes realmente viven cada día? Quiénes sólo existen?.

Escuché hace algunos días que existir era similar a subsistir, en palabras más simples vendría siendo como seguir el ritmo del deber ser sin cuestionar, levantarse cada día para ir al trabajo, caminar por el mismo sendero, comer, dormir y esperar silenciosamente la muerte que en algún momento vendrá por nosotros sin preguntarnos la estúpida si queremos realmente viajar con ella de compañera.

Desde la otra acera de la misma calle están los que viven, los que sienten el aire cada día en su cara, los que bajo los rayos del sol o el agua de la lluvia deciden caminar por veredas diferentes sólo por sentir como es. Cada día es una nueva aventura llena de misterios por disfrutar y aprehender.

En qué camino estoy? A veces yo mismo me encuentro durmiendo en vida, en grandes momentos estoy ausente. Por qué? Cuándo se esfuman las ganas de desfilar y decides sentarte a mirar pasar a los demás, quienes marchan al compás de un ritmo que solía ser conocido y en un solo parpadeo no sabes ni la letra siquiera. Cuándo vamos perdiendo la energía para despertar al resto?. No quiero esa no-vida para mi.

Ahora solo quiero descansar, cerrar las cortinas de ese gran ventanal, apagar el maldito celular que no para de sonar para recordarme que ninguno de esos que te llama es alguien a quien quieras responder, quiero detener el instante para deslizarme lentamente en la agonía del silencio, del sentir el tic-tac del reloj colgado en esa pared desnuda de tanta dejación de mi mismo.

Ahora tienes la mirada pérdida, el brillo de tus ojos se esfumo, casi estás en blanco y negro porque hasta los colores han decidido abandonar tu paisaje, mientras sigue sonando la canción que lágrimas exprime de tu corazón, cansado de latir por inercia, por existir… “libres respirábamos tu y yo, nace el sentimiento en mitad del llanto”… muere la lentitud del paladar, las comisuras se quiebran para esbozar una tibia sonrisa que el comienzo de un nuevo caminar.

Párate, mírate otra vez en ese vidrio, ves el reflejo o el alma?. Te abandono el cuerpo o tu esencia deambula esperando por ti en algún rincón de la habitación, logras visualizar esta dualidad o prefieres ignorarte…

No escuches las voces, no escuches el murmullo, concéntrate en el griterío …

El jolgorío se apodera de las calles, la música desborda los oídos de los transeúntes atónitos ante esta novedad. Las vitrinas cuelgan insignificantes colores que casi parecen desvanecerse en mitad de la tarde. Después de un breve silencio todos aceleran el paso como empujados por una fuerza que ellos mismos desconocen, corren a sus casas, esperando encontrar algún indicio de la metamorfosís que sucede en un universo paralelo.
Donde había oscuridad ahora encandila la luz, donde había nieve ahora solo hay calor, y así en un sin fin de contrastes esperan asomarse lentamente antes sus ojos que ya no desean mirar.
Pero si todo esta cambiando en el exterior, que está sucediendo dentro? No podemos resistirnos a la dinámica del cambio, tal como hemos escuchado “el hombre no puede bañarse 2 veces en el mismo río”

Todos se preparan para el viaje, las maletas llenan el camino que se pierde ante tus ojos.

Viveme solo una hora…