THE END

Hoy cierro la puerta...
Clausuro aquella habitación perfecta en su esencia corrupta, destruyo lo que construí con tanta abnegación...deshilacho mis sentimientos hasta convertirlos en polvo, el cual meto en una caja sin fondo, que terminará arrumbada junto a una pila de trastes olvidados, cargados de sentimientos, en algún rincón
Es la última vez que escribo sobre la existencia del caballero de la armadura oxidada, es la última vez que exhalo su nombre y vislumbro su castillo entre áquellas colinas doradas entre nubes de algodón, será también el fin de la melancolía, de las noches sin poder cerrar las persianas atoradas entre la mugre que tiraste ante el supuesto abandono
Las monedas de oro fueron más importantes que la humildad de un plebeyo, los cofres con tesoros fueron más deslumbrantes que el vacío de esas manos flacuchentas y curtidas de tanta caricia contenida, las posibles conquistas atrayeron más tu atención que haber ganado el corazón de un mortal, la alquimia era un juego aún más imponente que las palabras vocíferadas en la oscuridad de ese recoveco clandestino
Hemos llegado al punto del camino donde los senderos se dividen, cada transeúnte observa atónito el principio del fin...