Cambiamos un número al final...destapamos la champagna helada, gritamos de júbilo, abrazamos a quienes queremos, arrancamos con mucha agilidad la última página del calendario, planificamos a qué fiesta mundial iremos...mientras esto sucede, No puedo dejar de preguntarme qué estamos celebrando.
A caso alquien si quiera se detiene a reflexionar sobre la dinámica del cambio, el autoanalisis, las proyecciones, será que en este milenio no hemos convertido en hedonistas que sólo queremos celebrar lo que sea, inventando nuevos eventos cada día.
1 comentario:
Un año nuevo que disfrutar, que finalmente la unica diferencia a los otros seguiremos siendo nosotros mismos, hay en nosotros un verdadero cambio en cada año, eso depende de ti y de mi.
Saludos.
Elva*
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